Roland Garros fue un aviador francés que se convirtió en la primera persona en cruzar sin paradas el mar mediterráneo, en casi seis horas, luego de hacerlo el 23 de septiembre de 1913. El segundo Grand Slam del año y el torneo más importante que se juega en polvo de ladrillo lleva su nombre en su honor.
Su paso por el ejército En agosto de 1914, al momento de estallar la primera guerra mundial, el piloto Roland Garros se alistó voluntariamente en el ejército francés. Durante su servicio, llevó a cabo varias misiones de reconocimiento y bombardeo. Fue también el primero en probar el mecanismo creado por el ingeniero Raymond Saulnier, que consistía en que las ametralladoras disparasen a través de las hélices de un avión. Este avance tecnológico le dio una gran ventaja a Francia en las batallas en el aire.
Luego de ser capturado y apresado en Alemania por tres años, en 1918 se escapó y volvió a París, donde fue recibido como un héroe. El 5 de octubre de ese año, a un mes del final del conflicto bélico, falleció luego de que su avión fuera derribado en combate, en la ciudad francesa de Vouziers. El 6 de marzo de 1989 fue condecorado con la Legión de Honor, con grado de oficial, la máxima distinción de Francia, creada por Napoleón Bonaparte en 1802.
Su vínculo con el tenis En 1927 el equipo francés de tenis dio el batacazo al ganarle la final de Copa Davis al dominador de la competencia, Estados Unidos, en Filadelfia. El grupo denominado “los cuatro mosqueteros”, integrado por Jacques Brugnon, Jean Borotra, Henri Cochet y René Lacoste, había conseguido la primera ensaladera y el próximo año tenía que defenderla en su país.
En menos de un año la Federación Francesa de Tenis construyó el estadio, en un terreno de tres hectáreas concedido por el estado. El encargado de la obra era Emile Leusier, quien fue íntimo amigo de Garros y el principal responsable de que el estadio llevara su nombre. Los franceses no sólo lograron defender el título sino que mantuvieron su hegemonía hasta 1932.
En 1928, el mismo estadio recibió por primera vez el Abierto de Francia, torneo que ya se venía jugando desde 1891 y que hasta 1925 sólo jugaban los jugadores franceses. Por extensión el segundo certamen grande del tenis en el año, de los cuatro que existen, empezó a llevar su nombre.
Tomado de canaltenis.com