No pensar en nada, no analizar.
Este es el claro ejemplo donde menos es más. Muchas veces pensamos que el usar la cabeza en la cancha y estar pensando constantemente es la manera de rendir mejor. La realidad es que la tendencia de la mayoría de los jugadores es sobre analizar.
En el tenis una vez que empieza el punto se juega por instinto con base a sus habilidades automatizadas. No se tiene tiempo de pensar como se le va a pegar a la pelota o a donde se va a tirar. El jugador debe de reconocer la situación y reaccionar.